Impacto e importancia de la inteligencia emocional (IE)

En nuestra vida tendemos a enfocarnos en las emociones más desagradables. De hecho en nuestro vocabulario las palabras que califican las emociones desagradables son el doble que las que se refieren a emociones agradables. Por defecto esto nos hace ver el lado menos optimista de la vida.
La vida es una experiencia emocional. Y así como aprendas a controlar tus emociones, será la calidad de tu vida. Tu felicidad por lo tanto depende de ello.
Muchos de nosotros no somos capaces de entender lo que sentimos o de nombrar nuestras emociones y eso es algo que necesitamos para convertirnos en emocionalmente inteligentes y emocionalmente conscientes de los sentimientos que experimentamos.
La IE (inteligencia emocional) es tu habilidad para identificar lo que sientes, porque lo sientes y como lo sientes, así como lo que sienten los que te rodean. Por lo que cuando aprendemos a ser más emocionalmente inteligentes comenzamos a dominarnos a nosotros mismos, comprendiendo que te mantiene atrapado, que te limita, que te dispara, que te enoja, que te pone triste, te lastima y que causa que te tomes las cosas personalmente. Por lo que dominar las emociones te hará menos reactivo y más interactivo.
Cuando tienes el control de tus emociones eres emocionalmente inteligente. Cuando tus emociones te controlan a ti actúas irracional y emocionalmente estas esclavizado por ellas.
Para usarlas de forma efectiva necesitas entender cómo pueden servirte. Debes aprender de ellas para crear el resultado que tú deseas.
Las emociones son señales de acción, su significado está oculto. Hay mucho que aprender de ellas. Todas llaman a la acción y pueden convertirse en tu aliado. Aprender a usar estas señales te libera y te permite experimentar la riqueza de la vida y de todo lo que los humanos somos capaces. Conocemos e identificamos los mensajes de las emociones agradables, pero no tanto los de las desagradables. Cuando no las entendemos se convierten en experiencias desagradables para nosotros sin embargo todas ellas contienen mensajes positivos o instrucciones que pueden ayudarnos a crecer.
Experimentamos emociones por varios motivos y las experimentamos porque las emociones son el lenguaje de la mente subconsciente. Y las podemos dominar cuando aprendemos como nos sirven en lugar de dejar que nos esclavicen.

El dolor por ejemplo, todos lo sentimos en momentos de nuestra vida, este sentimiento doloroso surge a causa de la pérdida de confianza o una expectativa no cumplida por nosotros mismos o por otras personas. Puedes sentirla cuando te sientes herido o traicionado o maltratado o ignorado por alguien que te importa. Cuando los demás son insensibles a tus necesidades hace que nos sintamos decepcionados y podemos comunicar el sentimiento de dolor a través diversas emociones como el dolor o la ira. ¿Pero cuál es el mensaje oculto en esta emoción?
"Las cosas que duelen, instruyen" (Benjamín Franklin).
El mensaje del dolor nos dice que las expectativas no se han cumplido. Muchas veces este sentimiento surge cuando hemos esperado que alguien cumpliese su palabra y no lo hizo. Cuando esto pasa, sentimos una pérdida de intimidad, de confianza con esa persona, y la sensación de pérdida crea dolor. La solución es darte cuenta de que en realidad puede que no hayas perdido nada. Quizá lo que necesites perder es la falsa percepción de que esta persona está tratando de herirte. Quizá esta persona no sea consciente del impacto de sus acciones tienen o han tenido en tu vida. En realidad la mayoría de la gente ignora el impacto de sus palabras y acciones en la vida de otras personas. Por lo que es necesario comunicarte con las personas que te lastiman y decirles cómo te sientes, comunicar tus expectativas respecto a ellos o de lo contrario nunca las sabrá hasta que se las digas. Puede que lo que es valioso para ti, no lo sea para la otra persona. Nuestros valores son diferentes. Comunica tus valores a los demás, especialmente a tus seres queridos. Hazles saber que es importante para ti y cuáles son tus expectativas.

Cuando estamos heridos nos sentimos enfadados, ofendidos y aparece la ira. ¿Qué nos enseña la ira? ¿Qué podemos hacer en vez de agravar el Caos? Surgen sentimientos de ira cuando te sientes impotente, amenazado, tratado injustamente.
La ira es una sensación fisiológica debido a la reacción bioquímica en tu cuerpo. La adrenalina se genera en el cuerpo como un mecanismo de protección que prepara nuestro cuerpo para luchar contra el ataque. Crea tensión corporal y emociones perturbadoras como la frustración, irritabilidad, molestia, resentimiento, odio, incluso rabia a diversos niveles. Puedes incluso elegir reaccionar con ira de manera dominante en vez de sentirte herido porque percibes el dolor como un signo de vulnerabilidad. La ira nos mantiene a distancia permitiendo ocultar nuestra vulnerabilidad, de hecho la ira no es más que un escudo que cubre nuestros temores y heridas subyacentes. Dentro de las personas con mal genio hay un dolor inquietante, frustración, un grito pidiendo ayuda. El mensaje oculto de la ira es que una norma importante de tu vida ha sido violada por alguien o incluso por ti mismo. La mayoría de la ira no sucede en el contexto real de lo que está sucediendo.  Es una vieja historia, una herida, un dolor del pasado, una vieja preocupación. ¿Soy suficientemente respetado? ¿Me importan? ¿Cómo se atreven? esto es lo que se denomina Child Mind o Ego Mind, el drama. Querer hacer de algo un problema mayor de lo que realmente es, porque no tienes una perspectiva real de la experiencia de la vida. ¿Realmente te has dado cuenta de la gente que tiene problemas graves de verdad? dramas reales como la pobreza, guerra, hambre... Entonces pregúntate, ¿realmente este problemas es tan grande como lo estoy tratando? En esencia, si te enfadas por el mismo problema una y otra vez. Están siendo víctima de esa mente dramática y solo tú tienes la habilidad de pararlo y dejarlo ir. Y la forma de hacerlo es ampliando el tiempo entre estímulo y respuesta. Ahí está el dominio. Ya no es la mente impulsiva sino la mente intencional.
La ira no es el camino para decirles a los demás que tú tienes razón y ellos no. No es una muestra de superioridad. En realidad es un grito fuerte de dolor interior.

La ira es una emoción secundaria. La primaria es la frustración. Que se traduce en querer algo y no conseguirlo. Si quieres superarlo solo tienes que detenerlo, detener el pensamiento negativo, ese patrón, ese dialogo interno. Eres malo y voy a castigarte, tú tienes la culpa... así te dejas automáticamente atrapar por el drama. Muchas veces este sentimiento de frustración es debido a creencias y pensamientos rígidos. Cuando esto te pase recuerda ser más flexible y adaptable para cambiar tu punto de vista que te está produciendo resultados negativos.
El mensaje de la frustración y la decepción, significa que tu cerebro cree que podrías estar haciéndolo mejor de lo que lo haces. La frustración es muy diferente de la decepción, que es el sentimiento de que hay algo que quieres en tu vida que nunca conseguirás. La frustración significa que tu solución a tu problema no está funcionando por lo que necesitas cambiar tu enfoque para conseguir tu objetivo. Cuando no usas tus talentos, tus dones en toda su extensión te sientes frustrado. Cuando no obtienes los resultados que esperas te sientes frustrado. Incluso puedes sentirte así sin ningún detonante previo. Si te centras demasiado en los problemas de tu vida te sentirás frustrado, sentirás irritabilidad constante y estado de infelicidad que surge como resultado a continuas frustraciones. A medida que esta crece y comienzas a aceptar la impotencia como resultado puede conllevar a un gran estado emocional llamado depresión.

Cuando sufres dolor y pérdida y no expresas y resuelves tus sentimientos de impotencia, dolor, ira y pena puede llevar la llamada gran D, depresión.

Cuando estas deprimido tiendes a concentrarte en tus perdidas, en tu vacío interior, sueños no cumplidos o problemas. Experimentando sentimiento de impotencia, sentimiento negativo del futuro con visión permanente, pesimismo. Solo se centran en lo negativo.
Otra emoción que puede llevarnos a la depresión es la pena. Esta ocurre cuando experimentamos una pérdida importante. Cuando sientes que nada tiene sentido y está fuera de tu control. La respuesta para el dolor es la aceptación. Aceptar que hay cosas que no podemos cambiar y solo podemos aceptarlas.
Necesitamos centrarnos en lo que podemos controlar y darnos cuenta de que a pesar de que no lo comprendamos, aun ha de haber un significado poderoso para ello. Lo que nos impide expresar la emoción del duelo es la emoción del miedo.

El miedo es una forma natural de protegernos del peligro real y actual. Nos prepara para escapar del daño. Las emociones temerosas incluyen, la preocupación, la aprensión, ansiedad, miedo e incluso terror. El miedo es simplemente la anticipación de que algo va a suceder y necesitas está preparado para afrontarlo.
No podemos permitir que le miedo controle nuestra vida, debemos enfrentarnos a lo que tememos a través de nuestra inteligencia. Miedos causados por lo desconocido, analízalo, entiéndelo, busca a alguien te que hable de ello, pero no dejes que controle tu vida. Estamos aquí de paso así que hagamos que sea agradable. Enfréntalo para poder superarlo y dejarlo ir.
Un estado de emoción que puede desconectarnos del mundo es la soledad. Todos la sentimos en algún momento de nuestra vida. Te sientes separado y desconectado de los demás. Cuando el dolor del aislamiento es abrumador te sientes desconsolado. La soledad es un signo autentico de necesidades sociales e íntimas no satisfechas. Cuando no estas emocionalmente disponible te separas de la gente, sientes soledad y aburrimiento.
Quieres conectarte con los demás pero tus miedos impiden que lo hagas. Como resultado nos encerramos en nosotros mismo haciéndonos inalcanzables para los demás.
Hay muchas ideas irracionales que nos conducen a sentimientos de soledad, incluyendo pensamientos como: nadie me quiere, nadie está disponible para mí, están demasiado ocupados, son egoístas.
Puede ser temporal pero el aislamiento emocional y fobia social pueden convertirse en casos clínicos.  El mensaje de la soledad es que es hora de conectarse con otras personas. Significa que realmente te importan los demás y quieres estar con ellos, necesitar saber qué tipo de conexión necesitas y ponerte inmediatamente en acción, empezar a disfrutar del placer del compañerismo. Supera tus miedos confiando en los demás, cambia tu percepción que es el mensaje que nos dan las emociones "negativas"o no agradables. Cambia el significado de asociación con las cosas, eventos, personas. Porque si continuas viéndolos como doloroso siempre lo serán. Si puedes cambiar el significado adjunto a cualquier cosa, entonces tendrás el poder para cambiar la experiencia en sí misma.

Uno de los peligros emocionales que pueden quitarte el impulso de vivir una vida plena es la emoción de autosuficiencia o indignidad. Esto ocurre cuando sentimos que no podemos hacer algo que se supone deberíamos ser capaces de hacer. Esta emoción nos manda un fuerte mensaje para que trabajes en ti mismo. Ya que no dispones de la habilidad o aptitud necesaria para la tarea a realizar. Necesitas más información, comprensión, conocimiento, estrategias, herramientas y confianza. Es una invitación a desarrollar habilidades para abordar los desafíos que son abrumadores.
El desarrollo personal tiene áreas donde se debe trabajar. La espiritual, emocional, social, mental y física.
Una de las formas rápidas de construir la confianza en uno mismo es pensar detenidamente quien eres y que quieres. Pensar en las habilidades que necesitas para construir una vida y carrera maravillosa y después trabajar todos los días para seguir mejorando en lo que sea importante para ti. Te iras sintiendo cada vez mejor en estas habilidades, la gente las complementará y así crecerá la confianza en ti mismo.

Cuando dejas de concentrarte en ti mismo y en tu crecimiento y empiezas a preocuparte demasiado por lo que hacen los demás puede dar lugar a la envidia y esta es sumamente auto destructiva. Esto se siente no porque te falte algo sino porque alguien tiene más que tú. Estar rodeado de gente feliz, saludable o rica cuando el dolor te está golpeando puede agitar sentimientos de envidia. Has de preguntarte, ¿cómo puedo mejorar mi vida? La superación personal es la clave. ¿Cuáles son mis nuevos objetivos? ¿Qué acción necesito tomar? ¿Qué habilidades debo desarrollar para tener éxito? ¿Qué es lo que puedo hacer para contribuir al mundo?

La culpa sana se produce cuando se lastima o perjudica a otra personal o a uno mismo. Te arrepientes de tus acciones y te sientes indigno, equivocado, estúpido, avergonzado, arrepentido o decepcionado de ti mismo. También ocurre cuando tu ira te invade.
Cuando experimentas la emoción de la culpa el mensaje que oculta, es que has de arreglar ciertas cosas en tu vida que son reparables y se pueden solucionar. Eso invoca tu compromiso de superar tus expectativas. Te dice, nunca de nuevo. Es suficiente.
Te sientes arrepentido cuando no tomaste la acción que deberías o cuando tomaste el camino equivocado obviando tus instintos. Violaste uno de tus valores y debes hacer algo para solucionarlo y no volverá a pasar en el futuro. Cuando la culpa no se maneja adecuadamente puede convertirse en resentimiento.

La falta de perdón es una emoción tóxica ya que hace más daño a la persona que no está dispuesta a perdonar.  El perdón puede ser un paso muy difícil pero es esencial para tu obtener el cierre emocional. Es liberador.
Te hace libre. No perdonas cuando todavía tienes arrepentimiento, cuando no hablas con la otra parte, cuando guardas rencor, resentimiento. Cuando todavía haces a alguien responsable de todos tus problemas. Cuando no aceptas la realidad, cuando retienes energía negativa hacia alguien o algo. O cuando dices "no puedo olvidar". Perdonar realmente significa dejarlo ir.
La realidad es que si pasas por la vida te vas a hacer daño. Cada uno de nosotros como seres humanos tenemos nuestras debilidades y lo hacemos lo mejor que podemos, en función de nuestro nivel de conciencia y humanidad.
Si alguien te ha lastimado, antes que nada recuerda, que lo estaban haciendo lo mejor que sabían, en función de donde está su nivel de conciencia en su viaje por la vida. Perdonarles, es algo no que ellos merecen, sino que tú mereces. Porque cuando no perdonas lo llevarás toda la vida en tu espalda. Es una elección deliberada. Decidir liberarte de la carga de amargura, ira y odio.
Cuando perdonas a alguien literalmente estas liberando a un prisionero ya que el mayor objetivo humano es la paz mental y los obstáculos para esta paz es la ira y la culpa dirigida a otras personas.

Hay 4 personas a las que necesitas perdonar si realmente estas comprometido a pasar al siguiente nivel, mejorar tu vida y aprender a vivir el presente.
En primer lugar has de perdonar a tus padres por cada error que cometieron y has de estar agradecido por haberte dado la vida. Si estas feliz de sentirte vivo, puedes perdonarlos por todo lo demás.

La segunda persona a la que has de perdonar es a tus relaciones que no funcionaron. Estas pueden ser tan intensas o amenazantes para tus sentimientos de autoestima que pueden conllevar años de daño y resentimiento. Tienes una parte de responsabilidad por la relaciones en tu vida que no funcionaron. Tener la fuerza e integridad para decir las palabra mágicas de "soy responsable" y pensar en tu parte de responsabilidad, en vez de pesar en la razones por las cual la otra parte tiene la culpa. Perdona y déjalo marchar. Le perdono y le deseo lo mejor.

La tercera persona que has de perdonar en tu vida es todas las demás personas que alguna vez te lastimaron en tu vida, cada jefe, amigo, traidor. Limpia la pizarra y perdona, borra cada uno de su nombre e imágenes.

Y la cuarta persona eres tú mismo. Debes perdonarte por cada cosa que has hecho o dicho. Deja de cargar con estos errores del pasado. Eso fue entonces y esto es ahora. No eras la persona que eres ahora. Eras una versión inmadura de la persona en la que te has convertido. Así que deja de maltratarte por algo del paso, que hizo una persona diferente. Toma el control de tus emociones.

Cuando te asalten las emociones pregúntate: ¿por qué me siento así? ¿Qué me está diciendo esta emoción? ¿Qué quiere enseñarme? ¿Cuál es el mensaje?
Tu eres la fuente de todos tus sentimientos y siempre el responsable de las respuesta de tus emociones. Culpar a otro por tus sentimientos, es un malgaste de tu energía. Las personas y las situaciones solo pueden desencadenar lo que ya está dentro de ti.
La próxima vez que te activen a experimentar una emoción desagradable, pregúntate. ¿Que necesito y saco de todo esto? ¿Cuáles son mis opciones? ¿Cuál es la mejor forma de lidiar con estos sentimientos? ¿Cuál es la mejor manera de resolver estos sentimientos recurrentes? Cuando respondes de forma inteligente a tus emociones puedes encontrar mensajes ocultos de lo que esa emoción está tratando de comunicarte.