❤ Mi diario: La felicidad reside en ti


La felicidad reside en ti mismo.  A menudo cometemos el error de buscarla fuera: en los demás, en lo material, en las relaciones.  Pero lo cierto, es que está en nosotros, es un trabajo interior que depende de uno mismo.  Y comprender esto de verdad, lo cambia todo.

En demasiadas ocasiones, dejamos eso tan importante en nuestra vida en manos de terceros, e incluso del azar y el resultado es sin duda la decepción y la frustración. Necesitamos entender que no podemos esperar que los demás se comporten y hagan lo que nosotros creemos que es correcto y se debe hacer. Necesitamos entender que es necesario comunicarse y pedir las cosas en vez de dar por sentado como han de ser. Porque cada persona funciona de forma diferente, posee valores diferentes y ve la vida con un color propio.

La felicidad no consiste en lo que pasa a tu alrededor, sino en lo que pasa en ti mismo. Y si tú cambias, todo cambia. Esta dentro de uno mismo, no al lado de alguien. No podemos dejar esa responsabilidad tan nuestra a los demás. Porque ninguna relación puede darte la paz que no hayas creado de antemano dentro de ti.

Para ser feliz necesitas tener armonía en tu interior, y si eso no existe, créeme que nada ni nadie podrá proporcionártela. Es un trabajo propio, algo que nadie puede hacer por ti. Y si con todo lo que ya posees no eres capaz de hallar la felicidad, con todo lo que te falta tampoco la hallarás.

Realmente la felicidad es una actitud ante la vida. Es una decisión personal, de cómo afrontar todo lo que nos toca vivir,  tanto bueno como malo. Porque la vida implica, aunque no nos guste dolor y aunque nos pese, este es uno de los grandes maestros que encontraremos en su recorrido.

Cuando lo que uno piensa, dice y hace esta en armonía estamos en el camino apropiado. Quizás no lo tengas todo, pero si lo suficiente para dar gracias y sentirte afortunado. Vivir significa disfrutar de cada momento y ser consciente de todo lo que te rodea. Tener amor propio y respeto por uno mismo es indispensable. Porque cuando te quieres, cuando confías, cuando te aceptas, cuando te respetas, serás capaz de ofrecer lo mismo a los demás.

Cuando das cosas buenas las recibes multiplicadas por dos, es una de las leyes del universo. Y ese, sigue siendo el camino. Quiero, puedo y lo hago!

Porque la felicidad depende de lo que somos y no de lo que tenemos. Solo necesitas dos cosas para ser feliz, un cuerpo sano y un alma tranquila.

Porque cuando llevas el sol por dentro, no importa que fuera llueva.

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