Extracto hidroglicerinado de manzanilla

Glicerina vegetal 30 grs https://amzn.to/3tIFmrU

Agua destilada 70 grs https://amzn.to/3p0gjgf

Flor de manzanilla 10 grs https://amzn.to/45T3xFO

Conservante 1 gr https://amzn.to/3r6Aefi

Ácido cítrico 10 gotas https://amzn.to/3pWZLvF

 

Para empezar, desinfectaremos todos los utensilios que vamos a utilizar para evitar que se contamine nuestro producto.

En un recipiente de cristal mezclaremos la parte de agua y glicerina que es el denominado solvente hasta que se mezcle bien y quede transparente. Posteriormente añadiremos la manzanilla, asegurarnos que quede bien cubierta. Mediremos el pH ya que necesitamos que este entre 4-4.5 pH ligeramente ácido. Por lo que añadiremos ácido cítrico y el conservante natural.

Lo etiquetaremos y dejaremos macerar de 5 a 10 días, agitando al menos 1 vez al día. Y haremos un doble filtrado a la hora de envasar. Mejor almacenarlo en la nevera para alargar su vida útil sobre todo si hace mucho calor, y en envases opacos que no dejen pasar la luz.

*Usar 1 -10% máximo en nuestras elaboraciones. (Cremas, champús, gel…)

La Manzanilla posee propiedades antiinflamatorias significativas, gracias a su contenido de azuleno. Este componente ayuda a disminuir la hinchazón y enrojecimiento, lo que la hace ideal para aliviar y calmar condiciones inflamatorias de la tez.

Sus componentes antibacterianos actúan como guardianes de tu tez, combatiendo las bacterias que pueden causar problemas como el acné. Tiene capacidad para calmar y suavizar, brindando un alivio casi instantáneo a la dermis irritada o sensible.

Sus antioxidantes protegen la piel contra los daños ambientales como la contaminación y los rayos UV, que pueden opacar tu tez. Estos antioxidantes combaten los radicales libres, los culpables del envejecimiento prematuro y el daño a la piel, ayudando a mantener tu cara luciendo joven y fresca.

Esta planta es rica en aceites esenciales y antioxidantes que trabajan para nutrir e hidratar la piel. Al penetrar en las capas superficiales, estos nutrientes ayudan a restablecer la hidratación, lo que puede potenciar la suavidad y mejorar la textura.