Leche corporal reafirmante

Fase 1

Aceite de centella asiática 20 gr https://amzn.to/3YCkDFo

Aceite de algas fucus 10 gr https://amzn.to/4kjQ2pY

Manteca de karité 10 gr https://amzn.to/4aWb9cJ

Emulsionante 10 gr https://amzn.to/3vaGcSP

 

Fase 2

Agua de menta 30 gr https://amzn.to/3SRIGNo

Agua de té verde 30 gr https://amzn.to/3pzaAjB

DMAE 10 gr https://amzn.to/3TZ7wLI

Cafeína 6 gr https://amzn.to/3c6K3aA

 

Fase 3

Aloe Vera 50 gr https://amzn.to/49YIMLc

Vitamina E 1 gr https://amzn.to/43aEL3M

Glicerina vegetal 8 gr  https://amzn.to/34rlC0f

 

Fase 4

Extracto de centella asiática 5 gr https://amzn.to/4fsDYQQ

Extracto de algas 5 gr https://amzn.to/45dMNZJ

AE Romero 1 gr https://amzn.to/30BHGTP

AE palo de rosa 1 gr https://amzn.to/3rhHvLQ

AE geranio 1 gr https://amzn.to/3rQ70DR

Conservante natural 2 gr  https://amzn.to/4hsU65P

 

Para su elaboración, empezamos desinfectando todos los utensilios que vamos a usar. La cantidad obtenida es de 200 ml.

En este caso he usado extracto y macerados de elaboración casera.  Puedes ver cómo hacerlos en:

Extracto de Té Verde

Oleato de romero

Empezaremos haciendo las infusiones de la fase 2 con agua destilada para dejar que reposen antes de usar. Separaremos una pequeña parte de esa agua para disolver el DMAE y cafeína en polvo y esto lo reservaremos para añadirlo al final.

En un recipiente de cristal pesamos la fase 1 cera emulsionante junto con los aceites y manteca. Esta mezcla la ponemos al baño María a una temperatura media para evitar que se dañen sus propiedades.

En otro recipiente de cristal pesamos la fase acuosa y la ponemos al mismo baño María que la fase oleosa para que ambas tengan la misma temperatura de unos 65º-70º a la hora de mezclarlas.

Verteremos la fase acuosa sobre la oleosa mientras batimos para que se integren y vaya cogiendo consistencia de crema. Para acelerar el proceso, podemos introducir la mezcla en un recipiente de agua fría para ayudar a que se enfríe antes.

Una vez baje la temperatura es hora de añadir el resto de los ingredientes de la fase 3 y 4 uno a uno y remover bien. Ahora podremos añadir tb la cantidad reservada de la fase 2 donde disolvimos los principios activos.

Antes de añadir el conservante natural, utilizaremos una tira medidora de pH https://amzn.to/3u39Owj   para asegurarnos que es correcto para el equilibrio de nuestra piel y en caso necesario corregiremos.

***El pH de la piel, también conocido como el manto ácido, es ligeramente ácido y generalmente oscila entre 4.7 y 5.5. Este pH ácido es crucial para mantener la barrera de la piel contra bacterias, virus y otros contaminantes, y también ayuda a preservar la humedad y la elasticidad de la piel.

*Aumentar el pH: (alcalino)

Bicarbonato de sodio: Es un ingrediente alcalino que se puede añadir en pequeñas cantidades para aumentar el pH. Puedes disolverlo en agua destilada y agregarlo gota a gota a tu producto hasta alcanzar el pH deseado. https://amzn.to/48EIyce

*Bajar el pH: (ácido)

Ácido cítrico: Es un ácido suave que se puede agregar a los productos cosméticos para reducir su pH. Puedes preparar una solución al 50% mezclando 50 gramos de ácido cítrico en polvo con 50 gramos de agua destilada. Añade esta solución gota a gota a tu producto hasta alcanzar el pH deseado. https://amzn.to/3pWZLvF

Ácido láctico: Este ácido también es efectivo para bajar el pH. Se encuentra naturalmente en la piel y es adecuado para productos cosméticos. Puedes usar una solución al 80% de ácido láctico y añadirla gradualmente a tu producto. https://amzn.to/3alSdbp 

El DMAE, mejora la firmeza y la elasticidad de la piel, gracias a su efecto tensor, por lo que resulta perfecto para luchar contra la flacidez. Tiene propiedades envejecimiento, mejora la hidratación de la piel al aumentar la capacidad de retención de agua y es un protector antioxidante frente a la acción de los radicales libres.

La Centella Asiática promueve, protege y acelera la producción de colágeno, tiene efecto cicatrizante, acelera la curación de las heridas y es estimulante de la reparación de las mucosas. Es astringente gracias a los taninos que posee, antipruriginoso, antiséptico y antienvejecimiento. Recomendado en el tratamiento tópico de llagas, úlceras, prurito, eczemas, intertrigo, psoriasis, dermatitis, acné, heridas y quemaduras, cicatrices queloides, y estrías.

La Cafeína es un tratamiento perfecto para combatir todos los signos de la celulitis: nódulos grasos, piel de naranja, y retención de líquidos en la piel. Ya que la cafeína ayuda a reducir la inflamación y la hinchazón, al tiempo que tensa e ilumina la piel. Promueve la lipólisis, estimula el metabolismo, reafirma y tonifica la piel.  Elimina el exceso de líquidos y remueve las células muertas.

El Té Verde ayuda a la reconstrucción del tejido de soporte de la piel, reduciendo las arrugas y consiguiendo una piel más flexible y suave. Posee efectos antioxidantes y antiinflamatorios. Tienen la capacidad de inhibir la colagenasa, la enzima que causa la degradación del colágeno y el endotelio vascular. Protege contra el daño de los rayos UVB tanto antes como después de la exposición.  La aplicación tópica de extracto de té verde puede proteger de los efectos dañinos del sol y prevenir o incluso revertir el daño en la piel que puede conducir al envejecimiento, arrugas, manchas y cáncer.

El Fucus es un alga marina encontrada en las costas de todo el mundo. Es rica en polisacáridos (azúcares hidratantes) y polifenoles (antioxidantes naturales) es ampliamente utilizada en cosmética por su riqueza en oligoelementos y minerales como el yodo, hierro y calcio. Aumenta la elasticidad de la piel y estimula la microcirculación. Tiene un alto contenido de diversos minerales como el yodo, sodio, calcio, magnesio, potasio, silicio, azufre, hierro y vitaminas del complejo B. Posee propiedades antibacterianas, es antioxidante, diurética, emoliente y antinflamatoria. Ideal para tratamientos reafirmantes, anticelulíticos y para cosmética antiacné. Dosis: Entre el 1 y 10%